Conferencias

Cobertura universal de salud y nutrición. Brechas por cerrars

Santa Jiménez Acosta

Centro de Nutrición e Higiene de los Alimentos, INHEM, la Habana, Cuba

Introducción. En el año 2005, todos los Estados Miembros de la Organización Mundial de la Salud asumieron el compromiso de alcanzar la cobertura sanitaria universal. Para que un país pueda alcanzar esta meta es necesario actuar, entre otros ámbitos, sobre los determinantes sociales y la equidad en salud y lograr que cada persona y comunidad tenga acceso a los servicios de salud para la prevención, promoción, tratamiento y rehabilitación Al acercarnos al año 2015 en que vence el plazo establecido para la consecución de los Objetivos de Desarrollo del Milenio por las Naciones Unidas, es oportuno recordar que aun millones de personas están crónicamente subnutridos, las carencias de micronutrientes constituyen un problema para la salud pública y coexistiendo con este panorama el sobrepeso y la obesidad se han convertido en una epidemia mundial. La presente conferencia intenta abordar algunas situaciones relativas a la nutrición en la Atención primaria de salud y valorar algunas alternativas dentro de la cobertura universal de salud. Desarrollo. El perfil demográfico y epidemiológico de diversos países del mundo ha cambiado radicalmente. Las enfermedades no transmisibles constituyen un gran reto para las sociedades, y los sistemas de salud invierten una gran cantidad de recursos para hacerles frente, las acciones para su prevención y el control está obligatoriamente ligado a la adopción de un estilo de vida más saludable donde la adecuada alimentación y la nutrición y la actividad física pueden actuar modificando la carga global de morbilidad y brindar un optimo potencial para mejorar las condiciones de salud. Cobertura universal de salud. Brechas que persisten para lograr un mejoramiento de la nutrición en el nivel primario de atención en salud La Atención primaria de salud es el eslabón clave para el desarrollo de acciones nutricionales tanto para actividades de prevención, promoción, como de apoyo a las estrategias de control, por su vinculación con la comunidad y con el nivel local. Es poco factible que sin un adecuado soporte nutricional el componente preventivo sea capaz de reducir la incidencia de enfermedades crónico- degenerativas y la aparición de discapacidades. El derecho a la alimentación y el derecho a la salud están estrechamente relacionados y cada uno es importante para la realización del otro. El paquete de salud en relación con la nutrición en el marco de la cobertura universal de salud debe ampliarse, sobre todo en lo referido a las actividades de prevención, de esa forma el sistema podría satisfacer nuevas demandas que van imponiendo los acuerdos de diferentes cumbres y eventos sobre la alimentación y la nutrición y brindar una gama de servicios de calidad no solo en lo curativo sino en lo preventivo. Para lograr una efectiva cobertura universal, que garantice a todos, de manera igualitaria, el máximo nivel alcanzable de resultados en salud a partir de un paquete de servicios de alta calidad, se pueden llevar a cabo o perfeccionar actividades nutricionales orientadas a: a) capacitar a los profesionales sobre el manejo de la doble carga de malnutrición a nivel familiar para que puedan ofrecer soluciones con carácter científico y práctico que puedan ser llevaderas b) desarrollar acciones de puericultura prenatal encaminadas a mejorar el período de los primeros 1000 días (desde el comienzo del embarazo hasta los 2 años de edad), por su implicación en el futuro desarrollo infantil c) elaboración de instrumentos prácticos con acceso universal que permitan a las madres o cuidadores de los niños disponer de elementos básicos para el adecuado cuidado sobre la alimentación del niño, en ocasiones la rutina del monitoreo del crecimiento no alcanza a todos los niños y quedan excluidos algunos que tal vez sean los más necesitados, d) disponer de medios para la prevención, promoción, tratamiento y rehabilitación del sobrepeso y la obesidad que están en franco ascenso y no se atienden estas necesidades de salud de forma suficiente, tanto en cantidad como en calidad. e) Lograr que las guías alimentarias no solo estén diseñadas sino implementadas y evaluadas en la atención primaria. La consejería nutricional en la atención primaria de salud es una prestación pobremente practicada y necesaria para mejorar la calidad de los servicios ofrecidos No por ultimo deja de ser importante el diseño de sistemas de vigilancia alimentaria y nutricional a nivel local. Una mayor vigilancia en materia de alimentación y nutrición contribuirá a incrementar la eficacia de las intervenciones, la formulación de políticas y la rendición de cuentas. Cuantificar la frecuencia, distribución y tendencias de indicadores seleccionados sobre condiciones de salud y nutrición, incluyendo deficiencias nutricionales, indicadores de sobrepeso y obesidad, así como factores de riesgo conocidos de estas condiciones, en el ámbito local y regional, y para zonas urbanas y rurales es un imperativo en las condiciones actuales. En este sentido el sector salud puede dar su contribución, brindando información confiable sobre el estado nutricional de los grupos vulnerables, generando evidencias para acciones intersectoriales que impacten en la salud y la nutrición, que permita establecer prioridades y asignar los pocos recursos existentes de forma más eficiente. De igual forma la investigación sobre nutrición con un enfoque en las ciencias sociales podría aportar datos e indicadores que permitan medir los progresos en la cobertura nutricional. Como algunos países tienen mas recursos y desarrollo que otros la colaboración Sur-Sur y otros mecanismos de cooperación podrían ayudar a encaminar esfuerzos e igualar acciones entre países con diferentes recursos y desarrollo. Las investigaciones también podrían generar evidencias para sustentar acciones interinstitucionales que impacten en la salud y la nutrición de las personas y las comunidades, que permita ofrecer servicios nutricionales de más calidad a costos razonables buscando un equilibrio entre los objetivos de eficiencia, calidad y equidad del sistema para que todos los ciudadanos puedan acceder a estos servicios La revista The Lancet en el año 2008 publicó una serie de evidencias que han demostrado su efectividad en la disminución de la desnutrición materno-infantil y reconoce que algunas están siendo implementadas solo en algunas áreas o ni siquiera han sido implementadas, aún en países donde las intervenciones se incluyen en planes y políticas nacionales. Como ejemplo de programas exitosos que deben continuar señala : los suplementos de hierro durante el embarazo, la yodación universal de la sal, los suplementos de vitamina A para niños de 6 a 59 meses de edad, la iniciación temprana de la lactancia materna y la lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses de edad, la ligadura oportuna del cordón umbilical. Según estos nuevos análisis, los autores calculan que una cobertura universal con el conjunto completo de intervenciones comprobadas en los niveles observados de efectividad de los programas podría prevenir cerca de un cuarto de la mortalidad infantil en niños menores de 36 meses de vida y reducir la prevalencia del retardo del crecimiento a los 36 meses de vida en alrededor de un tercio, evitando así alrededor de 60 millones de vidas ajustados en función de la discapacidad (AVAD). Como parte de la cobertura universal de salud debe prestarse atención al fortalecimiento de estas intervenciones y al logro de su implementación Conclusiones Al acercarnos al período posterior a 2015, donde debemos hacer frente a una nueva agenda de desarrollo social el paquete de salud en relación con la nutrición en la atención primaria debe ampliarse para lograr una cobertura de salud de mayor calidad.

Referencias: 1. Etienne CF. Los determinantes sociales de la salud en las Américas. Rev Panam Salud Publica 2013; 34(6), 377-378 . 2. Organización Mundial de la Salud. Informe sobre la salud en el mundo 2013. Investigaciones para una cobertura sanitaria universal. Ginebra, 2013. 3. Flegal, K. M., M. D. Carroll, C. L. Ogden, and L. R. Curtin. Prevalence and trends in obesity among U.S. adults, 1999-2008. Journal of the American Medical Association 2010; 303(3):235-241. 4. Serie The Lancet sobre desnutrición materno-infantil. Resumen ejecutivo 652-030_Nutrition_Exec- Sum_A4_Sp_v4.indd 10 .2008. Promoción de actividad física en las Américas ID: 7718