1 Unversidad Iberoamericana Ciudad de México. 2 Centro Veritest, México. 3 Laboratorio Biomédica de Referencia, México.
La evidencia sugiere que diversos componentes de la dieta influyen en el desarrollo de la patología de los procesos inflamatorios incluyendo gastritis, síndrome de intestino irritable, dolor de cabeza, dermatitis, fatiga y retención de peso, entre otros. Una manera práctica de medirlos es a través de anticuerpos específicos para los alimentos. Objetivos: Describir la sensibilidad de alimentos presente en diversos grupos de edad a través de la detección de anticuerpos de inmunoglobulina G (IgG) específicos de 96 alimentos en suero en población de nivel socioeconómico alto de la Ciudad de México. Metodología: Estudio observacional, transversal con una duración de casi 5 años. La muestra estuvo conformada por 3,920 participantes (72.0% mujeres y 28.0% hombres). Se recolectó información sociodemográfica y de laboratorio. Para ello, se requirió de unas gotas de sangre tomadas mediante punción dactilar con 2 horas de ayuno. La medición de anticuerpos se llevó a cabo utilizando un método semi-cuantitativo. Se excluyeron los participantes que tomaron corticoesteroides durante un mes previo al estudio. Resultados: Anticuerpos de IgG fueron encontrados en 97.0% (n=3,803) de los participantes. El porcentaje de participantes que presentó anticuerpos específicos ≥3 alimentos fue significativamente mayor al porcentaje de participantes que presentó anticuerpos específicos ≤3 alimentos (84.0% vs. 13.0%, respectivamente; p<;0.001). Los alimentos a los que se presentó sensibilidad con mayor frecuencia en todos los grupos de edad fueron el huevo (58.20%), leche de vaca (55.70%), vainilla (50.60%), levadura de pan (42.79%), y arándano (42.20%) (p<0.05). Conclusiones: La prevalencia de sensibilidades es alta en la población estudiada y se encuentra presente en todos los grupos de edad. Los anticuerpos IgG pueden ser utilizados para guiar las dietas de las personas y mejorar su calidad de vida.