Póster

PO093. LAS NECESIDADES DE ENERGÍA ALIMENTARIA Y DETERMINACIÓN DE POBREZA EXTREMA, CANASTAS BÁSICAS DE ALIMENTOS Y NECESIDADES ALIMENTARIAS NACIONALES

Ricardo Sibrián1, Patricia Palma de Fulladolsa.

1 Programa Regional de Seguridad Alimentaria y Nutricional en Centroamérica, San Salvador, El Savaldor.

Las necesidades de energía alimentaria de las poblaciones es un insumo en la determinación de la línea de pobreza extrema, las cuales se estiman con base en las recomendaciones del grupo de expertos FAO/OMS/UNU 2001. La energía alimentaria depende principalmente del peso para la talla alcanzada y de la actividad física de los individuos según edad y sexo. La energía alimentaria requerida por una población considera además su estructura de edad y sexo. Ante la ausencia de la información sobre talla alcanzada en todos los grupos de edad y sexo de la población, las estimaciones de energía alimentaria han utilizado el peso según la edad con el patrón de crecimiento de la población de referencia de la OMS. Este estudio informa sobre la magnitud de la sobre-estimación resultante de la aplicación del peso para la edad con respecto al peso para la talla alcanzada ambos según los estándares de la OMS, usando diferentes niveles de actividad física y la estructura de edad y sexo de las poblaciones de Costa rica y Guatemala como ejemplos que ilustran la magnitud del sesgo en poblaciones con diferente estado nutricional. Los resultados muestran que los sesgos de sobre-estimación de los requerimientos de energía alimentaria varían desde 65 hasta 75 kilo-calorías diarias por persona para niveles de actividad física sedentaria y activa respectivamente en Costa Rica y desde 150 hasta 170 kilo-calorías diarias por persona para niveles de actividad física sedentaria y activa respectivamente en Guatemala. Estos hallazgos tienen implicaciones en la estimación de pobreza extrema, estimación de la canasta básica de alimentos, determinación de salarios mínimos y de las necesidades alimentarias de las poblaciones en general. Los resultados sugieren la necesidad de actualizar la talla alcanzada en toda la población para estimar los requerimientos de energía alimentaria más apropiadamente.