Póster

PO191. DINÁMICAS ALIMENTARIAS Y PERCEPCIÓN DE HAMBRE EN HOGARES BENEFICIARIOS DE PROGRAMAS DE COMPLEMENTACIÓN ALIMENTARIA EN MEDELLÍN

Luz Marina Arboleda Montoya1

1 Universidad de Antioquia, Antioquia, Colombia

Introducción: La alimentación es un hecho social complejo. Los factores macro-sociales tienen relación con la disponibilidad y costo global de los alimentos, mientras que los factores micro-sociales son más relacionales y hacen referencia a los aspectos simbólicos y a los valores, significados y percepciones asociados a la alimentación. Metodología: Esta investigación se realizó con familias beneficiarias de programas alimentarios: Buen Comienzo y Restaurantes Escolares, con el objetivo de identificar aspectos sobre dinámica alimentaria y hambre en los hogares, para ellos se utilizó un enfoque cualitativo, método de etnografía enfocada y las técnicas de entrevistas individuales y grupales, grupos focales y observaciones. Resultados: Los consumos alimentarios en los hogares son de escasez prefiriendo alimentos que les brinde saciedad como los cereales, principalmente el arroz, dulces como la aguapanela, y las carnes las reemplazan por salchichón o huevo; respecto al consumo de frutas y verduras es casi nulo, consideran que estos alimentos tienen una baja densidad calórica, y en vez de producirles saciedad se comportan como aperitivos. Cuando tienen más disponibilidad de dinero, compran alimentos como yogurt, leche y frutas para ofrecerle a los niños, y frijoles y carne para consumo de toda la familia. La sopa la preparan con mayor frecuencia, porque pueden combinarle los alimentos que tengan disponibles, además, la consideran nutritiva. Se evidenciaron casos de hambre oculta, por el bajo acceso y consumo de alimentos ricos en micronutrientes, principalmente en mujeresmadres, pues les dan preferencia a sus hijos para ofrecer los alimentos disponibles y más nutritivos. El hambre no es percibida como una sensación física sino en función de los alimentos disponibles para sus hijos. Conclusiones: Tanto el Estado como la sociedad y los hogares protegen a los niños del flagelo del hambre; no obstante, el consumo alimentario en sus hogares es insuficiente e inadecuado.