Comunicaciones - Pósters

https://doi.org/10.37527/2023.73.S1

P094/S2-P30 REFORMULACIÓN DE ALIMENTOS CON HARINAS DE FRUTAS Y/O VERDURAS

Dra. Addí Rhode Navarro Cruz1, M.C. Martin Lazcano-Hernández1, M.E.C. Obdulia Vera-López1, M.C. Daniel Juárez-Serrano1, M.C. Iván Cesar-Arteaga1, Dr. Ashuin Kammar-García2, Estudiante Francisco Juárez-Hernández1, Dra. Orietta Segura-Badilla3, M.C. Gladys Qiezada-Figueroa3, Dra. Paola Hern+andez-Carranza1

1Facultad Ciencias Químicas, Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, Puebla, Mexico, 2Dirección de Investigación. Instituto Nacional de Geriatría, México, México, México, 3Facultad Ciencias de la Salud y los Alimentos, Depto. Nutrición y Salud Pública, Universidad del Bío-Bío, Chile, Chillán, Chile.



Introducción: Las harinas vegetales a diferencia de las harinas de cereales, presentan un alto contenido de vitaminas, minerales y compuestos antioxidantes, beneficiosos para la salud. Objetivo: Se propone la incorporación de harinas a base de vegetales (betabel Beta vulgaris, espinaca Spinacia oleracea L. y jitomate Solanum lycopersicum L.) en diversos productos alimentarios para consumo humano. Métodos: Los vegetales seleccionados fueron lavados, desinfectados, secados, molidos y tamizados obteniendo una harina homogénea. Se determinaron propiedades funcionales como capacidad de hinchamiento, absorción de agua y aceite, formación de espuma y dispersabilidad. Se desarrollaron pasta para sopa, churros y galletas con 10-40% de harinas de espinaca, betabel y/o jitomate que se evaluaron sensorialmente por escala hedónica de 9 puntos y panelistas no entrenados. Resultados: Las harinas de betabel y jitomate fueron las más aceptadas (me gusta bastante-me gusta muchísimo) con adiciones de hasta 20%. La harina menos favorecida por los tonos amargos que daba a algunos productos fue la harina de espinaca, sin embargo, por sus propiedades fisicoquímicas y funcionalidad se propone su incorporación a otros productos alimenticios y evaluar niveles menores de adición. Conclusión: Frutas y verduras tienen una vida en anaquel limitada y una de las primeras medidas para reducir las tensiones entre el crecimiento del consumo y el aumento en la producción es promover la reducción de las pérdidas de alimentos. Su transformación en harinas para su posterior incorporación en alimentos redundaría en potencial para aumentar la eficiencia de la cadena alimentaria. Se concluye que es posible desarrollar reformulaciones de alimentos incorporando harinas de frutas y verduras potencialmente mejorando su aporte nutricional y funcional.

Palabras clave: reformulación de alimentos, sostenibilidad, vegetales